La sociedad cambia, evoluciona, aparecen nuevos valores, movimientos sociales, partidos políticos, nuevos modelos de aprendizaje, todo esto comporta la aparición de nuevos paradigmas en la gestión de organizaciones, solo tenemos que detenernos un momento, y preguntarnos: ¿Cuál es el focus de atención de las organizaciones actuales? ¿Está alineado con nuestro propósito personal?
Hasta el día de hoy, desde mi perspectiva personal, los objetivos de las organizaciones empresariales son tres:
- Maximización del Beneficio
- Mantener y aumentar el poder y la autoridad.
- El control como instrumento para mantener el status.
En las organizaciones actuales, existe mucho miedo, de perder el empleo, del fracaso, de perder competitividad, y este miedo provoca que las organizaciones sean tan jerárquicas, existan tantos controles y nos llegue a obsesionar el ganar dinero.
Si estos ejes actuales se ponen en peligro, se generan resistencias al cambio, ya que las organizaciones se sienten inseguras y temen por su supervivencia. Pero podemos pensar en un nuevo tipo de organización que niegue o anule la autoridad basada en la fuerza física, o legal o del capital, podemos pensar en una organización que su objetivo no sea el beneficio y su maximización, podemos pensar en una organización que no controle a sus empleados, … Este tipo de organizaciones, existen, se denominan organizaciones plenas, Frederic Laloux, en su libro “Reinventar las organizaciones”, nos habla de su existencia. Esto nos aporta un cambio de paradigma en las empresas, y nos va hacer entrar en una nueva era empresarial.
La clave está en conocer el focus de atención de la organización, también se puede hablar del propósito básico. ¿Nos podemos plantear un focus basado en la plenitud de las personas? Es decir, que las organizaciones empresariales, tengan como propósito principal, la plenitud y/o desarrollo personal de sus miembros, que las personas vayan al trabajo para desarrollar su equilibrio personal, para ser felices. En estos momentos este tipo de pensamiento puede parecer una locura, pero ¿Es posible?
En estos momentos ya empresas que lo están desarrollando, pero no son la mayoría. Este planeamiento genera, solo leerlo muchas resistencias, ya que estamos en un mundo, donde el trabajo se ve como un sacrificio para obtener dinero, como una obligación para ser mejores personas, como una actividad poco motivadora, … ¿Podemos cambiar esta creencia? Si se puede!!!, pero debemos de tener presente que tenemos unas creencias muy arraigadas sobre cuál es el propósito de la empresa, y después de tantos siglos, no será fácil cambiarlo. Debemos empezar en nosotros mismos, estos nuevos tipos de organizaciones, denominadas organizaciones plenas/felices, requieren un tipo de liderazgo diferente, el líder consciente, es aquel que cuyo focus de atención no están en conquistar o dominar a los denominados subordinados, sino en estar uno mismo en equilibrio y ver la organización como un espacio de aprendizaje y de crecimiento.
Hasta día de hoy el propósito de todos los estilos de liderazgo existentes ha sido imponer, conquistar o dominar a la organización, con diferentes tipos de medios: fuerza física, legal o el miedo. Ahora está naciendo un líder con nuevos valores, el concepto de plenitud y felicidad se está extendiendo, y no solo en el modo de mejora de condiciones laborales (que es importante), sino realizando un cambio total de propósito de la propia organización, donde el beneficio es una condición a cumplir, pero no es el objetivo. La misión de las organizaciones, debería ser el mismo que el de las personas, ser felices, ser plenas, esto comporta toda una serie de cambios en la gestión que deberíamos asumir:
- Estructuras organizativas no jerarquizadas.
- Autogestión.
- No existencia de cargos fijos, roles cambiantes.
- Trabajo por proyectos y en equipo
- Consenso de las decisiones.
- …
Para poder gestionar este nuevo tipo de organizaciones debemos básicamente trabajar en nosotros mismos, para poder conseguir tres aspectos esenciales:
- Confianza en nosotros mismos, potenciando nuestra autoestima personal.
- Vemos lo que proyectamos de nosotros mismos, no hay situaciones conflictivas, es nuestra percepción que la convierte en problemática.
- Mejorar nuestra comunicación intrapersonal e interpersonal.
Las personas cambiamos en cada momento, hay una evolución en cuanto valores y perspectivas personales, y ello está haciendo que este cambio también llegue a las organizaciones empresariales.
Jordi Vilajosana.
Emprendedor social y profesor de universidad